viernes, 11 de abril de 2014

TAREA DE FILOSOFIA - vacaciones semana santa


Tarea de filosofía - a revisar el lunes 28
HAZ UN RESUMEN EN TU LIBRETA SOBRE EL SIGUIENTE TEXTO DESPÚES DE CONCLUIR EL TERCER PERIODO PARCIAL Y LA OBRA DE EMANUEL KANT.

EL RESUMEN DEBE CONTENER LOS PUNTOS MAS IMPORTANTES DE LA LECTURA Y MÍNIMO DEBE SER DE UNA HOJA.

AVISO FINAL: LA TAREA DE SOCIOLOGIA SE SUBIRÁ ESTE SÁBADO A PARTIR DE LAS 10 AM.



EL ROMANTICISMO

El Romanticismo, fue la última gran época cultural europea.Empezó muy a finales del siglo XVIII y duró hasta mediados del siglo pasado. No obstante, después de 1850 ya no tiene sentido hablar de «épocas» enteras que abarquen literatura y filosofía, arte, ciencia y música. El Romanticismo fue la última «postura común» ante la vida en Europa. Surgió en Alemania como una reacción contra el culto a la razón de la Ilustración. Después de Kant y su fría razón, los nuevos lemas fueron «sentimiento», «imaginación», «vivencia» y “añoranza». Ahora esta subcorriente se convirtió en la corriente principal de la vida cultural alemana. Muchos románticos se consideraron herederos de Kant, pues el maestro había afirmado que lo que podemos saber sobre «das Ding an sich» es muy limitado. Por otro lado, había señalado lo importante que es la aportación del «yo» al conocimiento. Ahora cada individuo tenía libertad para dar su propia interpretación de la existencia. Los románticos aprovecharon esta libertad, convirtiéndola en un culto casi desenfrenado al «yo», lo cual también condujo a una revalorización del genio artístico. Un ejemplo es Beethoven, en cuya música nos encontramos con un ser que expresa sus propios sentimientos y añoranzas. En ese sentido Beethoven era un creador «libre”, al contrario que los maestros del Barroco, por ejemplo Bach y Handel, quienes compusieron sus obras en honor a Dios y, muy a menudo, conforme a reglas muy severas. Se puede apreciar lo romántica que es la «Sonata del Claro de Luna» y lo dramática que es la expresión que emplea Beethoven en la «Quinta sinfonía». De hecho hay muchos rasgos comunes entre el Renacimiento y el Romanticismo, quizás sobre todo en la importancia que otorgaban, unos y otros, al arte y a su significado para el conocimiento del hombre. En este campo Kant aportó lo suyo. En su estética había investigado qué es lo que sucede cuando nos sentimos abrumados por algo muy hermoso; por ejemplo, por una obra de arte. Cuando nos entregamos a una obra de arte sin servir a otros intereses que a la propia vivencia artística, nos acercamos a una percepción de «das Ding an sich». Quiere decir que el artista es capaz de transmitir algo que los filósofos no pueden expresar. El poeta alemán Schiller continuó desarrollando las ideas de Kant. Escribe que la actividad del artista es como un juego, y que el hombre sólo es libre cuando juega, porque entonces hace sus propias leyes. Los románticos opinaban que solamente el arte podía llevarnos más cerca de «lo inefable». Algunos fueron hasta el final y compararon al artista con Dios. Porque el artista crea su propia realidad exactamente de la misma manera que Dios ha creado el mundo. Se decía que el artista tiene una «fuerza imaginativa de creación del mundo». En su entusiasmo artístico podía llegar a sentir desaparecer la frontera entre sueño y realidad. Novalis, que era uno de los jóvenes genios, dijo que «el mundo se convierte en sueño, el sueño en mundo. Algunos también añoraron los tiempos pasados, por ejemplo la Edad Media, que ahora se revalorizó frente a la evaluación tan negativa de la Ilustración. Los románticos también añoraban culturas lejanas, por ejemplo Oriente y sus misterios. También se sentían atraídos por la noche, por el amanecer, por viejas ruinas y por lo sobrenatural. Se interesaban por lo que podríamos llamar los «aspectos oscuros» de la existencia, es decir, lo enigmático, lo tétrico y lo misterioso. Uno de los rasgos más importantes del romanticismo era precisamente la añoranza de la naturaleza y la mística de la misma. Representa, entre otras cosas, una reacción contra el universo mecánico de la Ilustración. Se ha dicho que el Romanticismo implicaba un renacimiento de la antigua conciencia cósmica.


A CONTINUACIÓN, ANOTA COMPLETAMENTE EL SIGUIENTE TEMA:

EL IDEALISMO ALEMÁN: Georg Wilhelm Friedrich HEGEL

Hegel fue un verdadero hijo del Romanticismo. Nació en Stuttgart en 1770 y comenzó a estudiar teología en Tubinga a los 18 años. A partir de 1799 colaboró con Schelling en Jena, justo cuando el movimiento romántico se
encontraba en su florecimiento más explosivo. Después de ser profesor en Jena fue nombrado catedrático en Heidelberg, que era el centro del Romanticismo nacional alemán. Fue nombrado catedrático en Berlín en 1818, precisamente en la época en la que esta ciudad estaba a punto de convertirse en un centro espiritual de Alemania. Murió de cólera en el mes de noviembre de 1831, pero para entonces el “hegelianismo» ya contaba con una gran adhesión en casi todas las universidades de Alemania.

Tanto el filósofo Schelling como los demás románticos habían pensado que el fondo de la existencia se encontraba en lo que llamaban el «espíritu universal». También Hegel emplea la expresión “espíritu universal», pero se refiere a la suma de todas las manifestaciones humanas. Porque sólo el ser humano tiene “espíritu». Nos está hablando de las vidas, de las ideas y de la cultura de los seres humanos.

Hegel dijo que «la verdad es subjetiva», con lo que rechazó la existencia de una «verdad» por encima o fuera de la razón humana como afirmaba Kant.

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